## Derogación de leyes consideradas “ideológicas”: un golpe de efecto inmediato
Uno de los movimientos más emblemáticos que se espera de un gobierno liderado por Santiago Abascal sería la eliminación de las leyes que tilda como “ideológicas”. Entre ellas, destacan la Ley de Memoria Histórica, la Ley de Igualdad de Género y las normativas relacionadas con el cambio climático.
La derogación de estas leyes no solo enviaría un mensaje claro sobre la nueva dirección política, sino que también desencadenaría un intenso debate social. La Ley de Memoria Histórica, por ejemplo, busca reconocer y reparar a las víctimas del franquismo, mientras que la Ley de Igualdad promueve la equidad entre hombres y mujeres y la lucha contra la violencia de género. Su eliminación representaría un retroceso para muchos sectores y podría polarizar aún más a la sociedad española.
En cuanto a la política ambiental, eliminar las leyes sobre cambio climático podría afectar la posición de España en la lucha contra el calentamiento global, comprometiendo acuerdos internacionales y poniendo en riesgo objetivos de sostenibilidad. Estos cambios inmediatos serían un claro golpe de efecto, diseñado para dejar patente el cambio radical en la gestión pública.
## Reestructuración ministerial y control migratorio: pasos hacia un gobierno más compacto y restrictivo
Otro de los movimientos clave en los primeros cien días de Abascal en el poder sería la reestructuración del Ejecutivo. El cierre de ministerios, especialmente del Ministerio de Igualdad, sería una de las primeras medidas a tomar. Este ministerio ha sido símbolo de políticas progresistas y su eliminación no solo reduciría el tamaño del gobierno, sino que también significaría una retirada de las políticas de promoción de igualdad de género.
Además, se espera un endurecimiento en el control de la inmigración. Esto implicaría una revisión exhaustiva de las políticas migratorias y un incremento en las medidas restrictivas para frenar la entrada irregular de personas. Este enfoque estricto podría generar tensiones tanto a nivel interno como con organismos internacionales y ONG que defienden los derechos humanos.
Por último, la revisión total de las subvenciones públicas formaría parte de la agenda para reducir el gasto público en áreas consideradas no prioritarias o ideológicas. Este ajuste presupuestario podría afectar a asociaciones, fundaciones y otros entes que dependen de estas ayudas, modificando el panorama del tercer sector en España.
## ¿Un cambio radical o un terremoto político?
Las medidas que probablemente implementaría Santiago Abascal en sus primeros meses de gobierno no serían simplemente cambios administrativos, sino verdaderos puntos de inflexión que podrían transformar el panorama político y social español. La derogación inmediata de leyes clave, el cierre de ministerios y el control estricto de la inmigración representarían un giro hacia una España más conservadora y restrictiva.
Sin embargo, estas acciones también podrían despertar una fuerte resistencia social y política, generando movilizaciones y debates encendidos que pondrían a prueba la estabilidad del país. En definitiva, la llegada de Abascal a La Moncloa, con estas medidas en marcha, podría significar tanto un cambio radical como un auténtico terremoto político.
Si quieres estar al día sobre cómo se desarrollaría esta hipotética situación y sus consecuencias, sigue atento a nuestras publicaciones. El futuro político de España podría estar a punto de experimentar una transformación sin precedentes.
